El 9 de octubre de 1908 llegaban a Chiclana los tres primeros Hermanos de las Escuelas Cristianas: Froilán de Jesús, Seleuque y Domingo José. No tardaron en despertar la admiración de todos por su entrega al trabajo escolar, por su preparación pedagógica y cultural y por el buen ambiente colegial y familiar que supieron crear en aquella humilde escuela gratuita de tres aulas, dirigida a los más pobres de la localidad.
En 1918 la escuela estuvo a punto de desaparecer y los Hermanos empeñaron cuanto pudieron para poder subsistir. Pero fue el sacerdote Francisco de Paula Fernández-Caro quien logró que los Hermanos permanecieran en Chiclana. En honor a él, el colegio recibió el nombre de «San José y San Francisco de Paula», aunque los chiclaneros siempre lo han conocido como «Escuela de los Hermanitos» o «Colegio La Salle».
En 1948, una donación de doña Aquilina Martínez de Pinillos hizo realidad el colegio que conocemos en la actualidad, sito en la calle Hormaza, y en 1997 se construyó un nuevo edificio para dar cabida a las nuevas necesidades de la reforma educativa.
A lo largo de sus cien años de historia, más de 5.000 alumnos y alumnas se han formado en las aulas de nuestro colegio.